🔊📖🐔 EL CANTO DEL GALLO
🗓️ Viernes, 3/10/2025
Serie: Hechos para una iglesia sencilla 💒
EP#15 LA IGLESIA SENCILLA es SOBRENATURAL: /2:1-11/ (II) fuego
📖 Lectura del día: Hechos 2:1-11 “y se les aparecieron lenguas repartidas, como de fuego, asentándose sobre cada uno de ellos” (2:3)
Pentecostés es una palabra griega que significa cincuenta. Era una de las seis grandes festividades de Israel, mencionadas en Levítico 23 como la fiesta de las “siete semanas” (vv. 15-21). Según la mayoría de los eruditos, el Pentecostés narrado en Hechos ocurrió en el año 30 d.C., el domingo 29 de mayo, a las nueve de la mañana. El primer Pentecostés fue en el monte Sinaí, donde nació la nación de Israel con señales sobrenaturales. El de Hechos 2 sucedió en Jerusalén, con viento, fuego y lenguas, marcando el nacimiento de la Iglesia.
El fuego del cielo siempre fue una expresión tangible del juicio divino . Lo vemos consumiendo a los codiciosos (Nm. 11:1-3), fulminando a Nadab y Abiú por su fuego extraño (Lv. 10:1-2), aceptando el sacrificio de David (1 Cr. 21:26), cayendo sobre el altar en el Carmelo (1 R. 18:38) o contra los soldados que desafiaron a Elías (2 R. 1:10,12). En el Nuevo Testamento también se manifiesta: Ananías y Safira murieron al mentir al Espíritu (Hch. 5:1-11) y Herodes fue herido por un ángel por no dar gloria a Dios (Hch. 12:23). Nuestro Dios, como dice Hebreos 12:29, es fuego consumidor; pero ese fuego también purifica (Zac. 13:9; Mal. 3:2-3; 1 P. 1:6-7).
En Pentecostés, “se les aparecieron lenguas repartidas, como de fuego, asentándose sobre cada uno” (Hch. 2:3). ¿Por qué no una sola para todos? Porque la obra de Dios es colectiva pero también personal. Cada discípulo recibió una porción, un fuego particular según la voluntad del Espíritu. Ese fuego se manifestó de formas distintas: Pedro, lleno del Espíritu, predicó y tres mil fueron salvos (Hch. 2:37-41). Esteban testificó con poder hasta el martirio (Hch. 7:55-60). Felipe llevó el evangelio a Samaria con señales (Hch. 8:5-8). Pablo y Silas, aun en prisión, cantaron himnos y el poder de Dios sacudió las puertas (Hch. 16:25-26). El fuego fue personal, pero nunca privado: cada chispa encendió vidas, comunidades y naciones.
Cuando naciste de nuevo, recibiste también ese fuego “particular” . Por eso Pablo exhorta: “Aviva el fuego del don que está en ti” (2 Ti. 1:6). ¿Tus brasas se apagan? Mira al libro de los Hechos: lo que sostuvo a la iglesia en persecución, lo que abrió puertas a las misiones y lo que dio valentía para anunciar a Cristo, fue siempre el fuego del Espíritu. Lo que necesitamos hoy no es un recurso humano, sino el viento fresco del Espíritu y el soplo vivificante de la Palabra.
¿Reaccionaremos? ¿Estamos dispuestos a ser purificados, encendidos y usados por Él?
📲 La Frase: ¿Reaccionaremos? ¿Estamos dispuestos a ser purificados, encendidos y usados por El? Entonces "Aviva el fuego del don que está en ti." ✍🏻 (HAG)