UNA NECESIDAD QUE RECIBE PROVISIÓN

🔊📖🐔 EL CANTO DEL GALLO

🗓️ Miércoles, 5/4/2023

Serie: 🥖🍷 Palabras del calvario y la resurrección

EP#3 UNA NECESIDAD QUE RECIBE PROVISIÓN

📖 “Cuando vio Jesús a su madre, y al discípulo a quien él amaba, que estaba presente, dijo a su madre: Mujer, he ahí tu hijo. Después dijo al discípulo: He ahí tu madre. Y desde aquella hora el discípulo la recibió en su casa” (Juan 19:26-27)

“Dejé todo por Cristo, ¿Y qué fue lo que encontré? Todo en Cristo” (Juan Calvino)

María llegó al Calvario vacía y allí encontró provisión para su necesidad...

“Este fue un hermoso gesto, y que dice mucho acerca de la naturaleza personal del amor de Jesús. Aunque Él estaba muriendo bajo el tipo más atroz de angustia, Jesús, el rey de amor, se volvió abnegadamente para cuidar de las necesidades terrenales de los que estaban a su lado. Aunque Él estaba ocupado con el evento más importante en la historia de la redención, recordó prever para las necesidades de una mujer, su madre” (John Mac Arthur)

Muchos años habían pasado desde el día en que María y José llevaron a Jesús al Templo para que fuera circuncidado. En esa ocasión un anciano llamado Simeón le dio a María una profecía impactante: “He aquí, éste está puesto para caída y para levantamiento de muchos en Israel, y para señal que será contradicha (y una espada traspasará tu misma alma), para que sean revelados los pensamientos de muchos corazones” (Lucas 2:34-35)

La “espada” que Simeón le mencionó en aquella ocasión ahora estaba atravesando su corazón al ver a su Hijo primogénito sufrir los horrores de la cruz y agonizar dolorosamente en ella… Lo que quizás no imaginó María fue que al estar al pie de la cruz no escucharía gemidos de dolor, sino palabras llenas de Gracia que tenían como propósito suplir su necesidad temporal…

“Mujer, he ahí tu hijo”. Esto manifiesta claramente la propia humanidad real de Cristo, quien hasta el final reconoció Su relación humana con María, de quien nació. Sin embargo, Su lenguaje nos enseña a no adorarla a ella, pues la llama: “mujer”, y nos lleva a honrarlo a Él, que en Su más terrible agonía pensó en las necesidades y aflicciones de ella, así como piensa de igual manera en todos los miembros de Su pueblo ya que ellos son Su madre y Su hermana y Su hermano. “Mujer, he ahí tu hijo”. Allí vemos al Hijo del hombre preocupándose por Su afligida madre con la ternura de un hijo. En una palabra anterior, cuando abrió el Paraíso, vieron al Hijo de Dios; ahora ven a Aquel que fue cierta y verdaderamente nacido de una mujer y sometido a la ley; y bajo la ley le ven todavía, pues honra a Su madre y se preocupa por ella en el artículo de la muerte. (Charles Spurgeon)

La palabra “provisión” significa: Abastecimiento, suministrar, dotar, facilitar, y aunque no se encuentra en este pasaje evidentemente es la idea central del mismo… 

Nosotros no vamos a la Cruz para obtener una solución a circunstancias temporales y materiales, sino que allí encontramos respuesta y provisión para nuestra miseria espiritual, por ese motivo no podemos acercarnos a la Cruz sin comprender cuál es nuestra verdadera necesidad…

¿Qué tenemos a nuestra disposición en la Cruz?

1.    Vida: “Todo aquel que cree que Jesús es el Cristo, es nacido de Dios; y todo aquel que ama al que engendró, ama también al que ha sido engendrado por él” (1 Juan 5:1)
2.    Virtud: “En esto conocemos que amamos a los hijos de Dios, cuando amamos a Dios, y guardamos sus mandamientos. Pues este es el amor a Dios, que guardemos sus mandamientos; y sus mandamientos no son gravosos” (1 Juan 5:2-3)
3.    Victoria: “Porque todo lo que es nacido de Dios vence al mundo; y esta es la victoria que ha vencido al mundo, nuestra fe. ¿Quién es el que vence al mundo, sino el que cree que Jesús es el Hijo de Dios?” (1 Juan 5:4-5)

📲 Recordemos: “Dios y solamente Dios es lo que satisface el alma” (John Piper)

🖋️ Daniel Chevriau