Tiempo ¿tirano o verdugo?

🔊📖🐔 EL CANTO DEL GALLO

🗓️ Jueves, 25/5/2023

Serie:🫂 Perdonando al estilo de Jesús 

EP#7- Tiempo ¿tirano o verdugo?

📖 “El hermano ofendido es más tenaz que una ciudad fuerte, y las contiendas de los hermanos son como cerrojos de alcázar” (Mt. 18:19)
    
💰 Cuando Jesús contó la historia del siervo a quien se le perdonó una deuda millonaria; pero mandó a la cárcel al que le debía una pequeña deuda terminó diciendo “entonces su señor, enojado, le entregó a los verdugos hasta que pagase todo lo que le debía. Así también mi Padre celestial hará con vosotros sino perdonáis de todo corazón cada uno a su hermano sus ofensas” ¿Lo puedes ver? Si no perdono seré castigado por verdugos. Miremos hoy al verdugo del tiempo.

👉 Cuando miras la historia de David, el rey perdonador, lo verás rodeado de rencorosos que eran castigados por los verdugos del tiempo. Absalón su hijo guardó rencor por tres años a su hermano Amnón y terminó asesinándolo; pero el caso emblemático es el de Simei. Habían pasado ya treinta años de la muerte de Saúl, y mientras David huía de Absalón (su hijo) apareció Simei, uno de la casa de Saúl, hijo de Gera. Simei apareció “maldiciendo: ¡Fuera, fuera, hombre sanguinario y perverso! Jehová te ha dado el pago de toda la sangre de la casa de Saúl, en lugar del cual tú has reinado, y Jehová ha entregado el reino en mano de tu hijo Absalón; y hete aquí sorprendido en tu maldad, porque eres hombre sanguinario”. Simei nunca había expresado su enojo de manera pública, nadie sabía lo que creía y pensaba. Habían pasado treinta años de rencor y esos años fueron su verdugo. 

🙃 Simei tenía una imagen de Saúl y David completamente distorsionada. Rencor más tiempo dieron como resultado en su mente: Saúl es un santo y David un demonio. ¡No hay duda que el verdugo de la falta de perdón usa el látigo “tiempo” para destruir la visión del “no perdonador”!

💪 ACCIÓN CLAVE: lee 2ª Samuel 16:5-14, descubre allí a los verdugos que atormentaban a Simei. 

📲 FRASE CLAVE: “El verdugo del tiempo destruye la visión del no perdonador. Unge tus ojos con el colirio del perdón” (HAG)