En su presencia

🔊📖🐔 EL CANTO DEL GALLO

🗓️ Lunes, 29/5/2023

Serie: 😁 SERIE DISFRUTANDO DE DIOS

CAPÍTULO 1: En su presencia

📖 Y él dijo: Mi presencia irá contigo, y te daré descanso. Y Moisés respondió: Si tu presencia no ha de ir conmigo, no nos saques de aquí. Éxodo 33:14-16

¡Que increíble promesa! La palabra hebrea para “descanso” aquí es “un descanso tranquilo y confortable.” Dios estaba diciendo, “¡No importa los enemigos o las pruebas que enfrentes, siempre podrás encontrar un descanso tranquilo en mí!” La idea de esta nueva serie es reflexionar sobre promesas como esta, que el Señor nuestro Dios nos regala en su Palabra y sostiene en los hechos con demostraciones cotidianas y que muchas veces no vemos debidamente

Piensa en esto: Si una persona tiene la presencia manifiesta de Dios en sí misma, no habrá ajetreo ni bullicio, sudor o lucha que pueda derribarle ni arrebatarle la alegría y el disfrute de su comunión con el Creador y la felicidad de disfrutar de su Presencia diaria. 

Si tienes la presencia de Jesús en tu vida, experimentarás el orden divino de Dios. Tendrás una paz y una calma, sin apuro o ansiedad, sin correr de un lado a otro buscando consejo, sin sentirse sin fundamento. ¡Vivirás en descanso, sabiendo que Dios tiene todo bajo control!
Consideremos estos ejemplos del antiguo testamento la importancia de tener y estar en la presencia de Dios y las bendiciones que el Señor trajo a las vidas de sus seguidores:

1º- La presencia de Dios era tan evidente en la vida de Abrahán, hasta los impíos a su alrededor reconocieron la diferencia entre sus vidas y la de él: “… Abimelec…habló a Abrahán, diciendo: Dios está contigo en todo lo que haces;” (Gen. 21:22). Este rey impío estaba diciendo, “Abraham, existe algo diferente en ti. ¡Dios te guía, te preserva y te bendice dondequiera que vas!” 

2º- Dios le prometió a Josué que ningún enemigo podría enfrentarse contra él mientras la presencia de Dios estaba con él: “Durante todos los días de tu vida, nadie será capaz de enfrentarse a ti. Así como estuve con Moisés, también estaré contigo; no te dejaré ni te abandonaré. Sé fuerte y valiente,” (Josué 1:5-6). Cuando el Espíritu de Dios está presente con nosotros, podemos ser fuertes y valientes – ¡porque ningún enemigo puede hacernos daño! 

3º- Dios le dijo a Gedeón. “… ¡El Señor está contigo, guerrero valiente! …Ve con la fuerza que tienes, y salvarás a Israel…” (Jueces 6:12, 14). La frase “la fuerza” en este verso se refiere al verso anterior – “el Señor está contigo.” ¿Puedes ver lo que Dios está diciendo? “Gedeón, hay un poder en ti que es tan poderoso, que puede salvar a Israel. ¡Y ese poder es mi presencia!” Las Escrituras revelan a Gedeón como un cobarde – así que, ¿por qué Dios le llamó “guerrero valiente?” ¡Es porque Dios quería demostrarle a Gedeón lo que cualquier persona puede hacer cuando la presencia del Señor esta con él!

4º- Dios le advirtió a Jeremías que la nación entera se volvería contra él y rechazaría sus profecías. Sin embargo, Dios prometió, “…pelearán contra ti, pero no te podrán vencer, porque yo estoy contigo para salvarte y librarte…” (Jer. 15:20). Dios estaba diciendo, “No importa si un país entero se pone en contra tuya, Jeremías. Lo único que importa es que mi presencia está contigo. ¡Ten confianza, yo estoy contigo!”

Piensa por un momento en ti día a día, si tienes a Jesucristo en tu corazón estas preguntas estarán de más ¿Experimentas tú la presencia de Dios en tu vida? ¿Puedes sentirle de un modo único en la alegría, la tristeza, el éxito o las dificultades? 

Nacer de nuevo, ser una nueva criatura es cambiar. Cambiar trae consigo que se abran tus ojos y tus oídos a una nueva realidad donde Dios se muestra y demuestra que Él también quiere compartir contigo su presencia. Dios es padre y como tal disfruta de la cercanía de sus hijos, que le agradezcas, que le cuentes tus cosas y que le veas allí donde los profanos no pueden verle.

📲 FRASE DE VIDA: He visto esto demostrado en mi vida. Dirás, “¡te estas gloriando!” ¡No – el hecho es, que la presencia de Dios ha estado conmigo a pesar de mí mismo!. Sergio Generalli