🔊📖 CENTRO CRISTIANO Y MISIONERO ETERNIDAD
🗓️ Jueves, 14/9/2023
🔟 SERIE: CÓDIGO DIEZ
Día 9: Quinto Mandamiento: Honra a tus padres (I)
📖 Lectura : “ Honra a tu padre y a tu madre para que tus días se alarguen en la tierra que Jehová tu Dios te da” (Ex. 20:12)
Esta es una generación de hijos desobedientes a sus padres. No nos debemos sorprender pues la Biblia lo predice “en los postreros días vendrán tiempos peligrosos. Porque habrá hombres.... desobedientes a los padres” (2ª Ti. 3:1-2).
Honra a tu padre y a tu madre. El honrarles significa colocarles en alto, en estima, obedecerles, o en otras palabras dejarles siempre bien. Cada vez que un niño, adolescente o joven se comporta mal en público está deshonrando a sus padres, les deja mal ante los demás. Para Dios era tan importante, que el que quebrantaba este mandamiento, en Israel, era duramente castigado. “Igualmente el que maldijere a su padre o a su madre morirá” (Ex. 21:17). Y en Dt. 21:18-21 se describe detalladamente la manera en que debía ser ejecutado el hijo rebelde y desobediente a sus padres.
¿Honras a tus padres? No solo nuestros hijos deben honrarnos, también nosotros debemos honrar a nuestros padres, sea que ellos estén vivos o no. William J. Bennett cuenta una historia que debe hacernos reflexionar. Un padre ya anciano y viudo al ver que sus tres hijos, ya casados, le estaban abandonando en sus últimos años se dijo a sí mismo: “mis hijos no quieren estar conmigo ahora, porque tienen miedo de que me convierta en una carga” e ideó un plan. Le pidió a un amigo carpintero que le hiciera un enorme cofre, luego a un amigo cerrajero que le diera una vieja cerradura con llave y a un amigo vidriero que le diera todos los pedazos de vidrios rotos que tuviera. Llenó el cofre con vidrios rotos, lo cerró y lo colocó debajo de la mesa. Sus hijos al visitarle tocaron el baúl y preguntaron qué era: “Oh, nada, son algunas cosillas que he ahorrado”. Al patearlo sintieron un tintineo y pensaron que se trataba del oro que por muchos años su padre habría atesorado. Por ello decidieron, entre ellos, que debían custodiar ese tesoro, hasta que su padre muriera. Entonces se turnaron para cuidar a su padre. Le cocinaban, lavaban la ropa, etc. Hasta que un día el anciano murió y ellos abrieron ansiosamente el baúl. Grande sorpresa se llevaron al descubrir solo vidrios rotos. Allí se sintieron avergonzados de su codicia y de lo que su padre tuvo que hacer para que ellos le cuidaran. Por las dudas vaciaron el baúl y en el fondo había un papel doblado. Lo abrieron y allí se leía en trazos temblorosos “honra a tu padre y a tu madre”. ¿Habrá vidrios en tu cofre?
(HAG)