El poder de la Palabra de Dios

🔊📖 EL CANTO DEL GALLO 🐓 


🗓️ 10 de Febrero del 2024


SERIE: SÁBADOS DE CAMBIO ↪️


Título: El poder de la Palabra de Dios 
El Camino a Emaús
Hola, queridos hermanos. Les habla Juan José Mena de la Iglesia. Dios es amor. En Barrio Centenario, Santa Fe Capital. Es un gusto poder compartir con ustedes este breve mensaje.
La verdad que es una satisfacción enorme poder ser parte de este ministerio de la Palabra de Dios y compartirlo con todos ustedes. 
Quería hablarles acerca del poder de la Palabra de Dios. 
Es algo que nosotros los creyentes realmente debemos conocer y entender el poder de su palabra. La historia de hoy es acerca de El camino a Emaús. Muchos hermanos conocen este relato bíblico que está en Lucas 24 versículo 13 al 32.
 Yo se los voy a leer. Y dice He aquí, dos de ellos iban el mismo día a una aldea llamada Emaús, que estaba a 60 estadios de Jerusalén, e iban hablando entre sí de todas aquellas cosas que habían acontecido. Sucedió que mientras hablaban y discutían entre sí, Jesús mismo se acercó y caminaba con ellos. Mas los ojos de ellos estaban velados para que no le conociesen. ¿Y les dijo Qué pláticas son estas que tenéis entre vosotros mientras camináis, y por qué estáis tristes? ¿Respondiendo uno de ellos, que se llamaba Cleofás, le dijo Eres tú el único forastero en Jerusalén, que no has sabido las cosas que en ella han acontecido en estos días? ¿Entonces él les dijo Qué cosa? Y ellos le dijeron De Jesús Nazareno, que fue varón profeta, poderoso en obras y en palabra, delante de Dios y todo el pueblo.
] ¿Y cómo le entregaron los principales sacerdotes y nuestros gobernantes a sentencia de muerte y le crucificaron? Pero nosotros esperábamos que él era el que había de redimir a Israel. Y ahora, además de todo esto, hoy ya es el tercer día que esto ha acontecido. 

Este relato nos muestra luego de que el Señor Jesús había sido crucificado y resucitado al tercer día. Observamos cómo el Señor Jesús se presenta ante estos hombres y va caminando junto con ellos. Iban hacia una aldea llamada Emaús. 
Nos llama muchísimo la atención, el saber, cómo es posible que estos hombres no hubiesen podido reconocer al Salvador. Pero ese no es el tema que quisiera ver hoy, sino que poder contarles brevemente acerca de esta historia. ¿Saben que la ciudad de Jerusalén se encontraba conmocionada y revolucionada con todo lo que estaba sucediendo acerca de la muerte de Jesús? Todo el mundo estaba enterado de lo que había pasado. Y en este relato vemos a dos hombres caminando hacia Emaús, una aldea cercana, hablando y discutiendo, quizás incrédulos, sorprendidos, pero sobre todo tristes. Ellos creían otra cosa, tenían otras expectativas. Esperaban a un Mesías redentor y poderoso que los librase del yugo romano y los restaurase a la libertad. 
Una libertad muy esperada por todo Israel.  Y en un momento aparece un caminante junto a ellos, un caminante que no observa con la misma óptica las conclusiones de estos hombres acerca de lo que había ocurrido en Jerusalén. Era Jesús, pero ellos no le podían distinguir.

Sus ojos estaban velados. La desilusión y la tristeza eran tan abrumadoras que no podían distinguirlo. Estos hombres le narraron todo lo que había pasado, y es en este relato que estos hombres, desnudaron ante, el Señor Jesús, la esperanza que tenían y esa esperanza no fue correspondida de acuerdo a los intereses que tenían los hombres en ese momento. Entonces dice la Palabra de Dios en el versículo 25 ¡Oh insensatos, y tardos de corazón para creer todo lo que los profetas han dicho! No era necesario que el Cristo padeciera estas cosas, y que entrara en su gloria. Y comenzando desde Moisés y siguiendo por todos los profetas, les declaraba en todas las Escrituras lo que de él decían. 
Parece increíble, pero los no entendían nada de lo que había pasado eran los caminantes, y el que sabía todo era el desconocido Jesús. El que parecía no saber nada era el más informado.
 Ahora también piensen en un momento; fácilmente Jesús se hubiese presentado ante ellos de una manera estruendosa. Jesús podría haberse presentado descendiendo de una bola de fuego con un coro de ángeles, cantando y alabando a Jesús. Hubiese podido reflejar una luz incandescente. ¡Se hubiese presentado con un terremoto estruendoso, rayos, relámpagos!!! ¿Podía, Jesús, podía hacer esto? ¿Podría haber hecho ese tipo de presentación?... Jesús tenía todo el poder para hacerlo, pero no lo hizo. Solamente utilizó la Palabra de Dios, no solo que la utilizó, sino que también les explicó. Fue didáctico con ellos. Como habrán notado, la Palabra de Dios tiene un poder extraordinario. 

Jesús no se valió ni de un milagro, ni se valió de una proeza. No se valió de algo que pudiese conmocionar a estos hombres, sino todo lo contrario, utilizó la Palabra de Dios, se decían el uno al otro ¿No ardía nuestro corazón en nosotros mientras nos hablaba en el camino? ¿Y cuando no se abría las Escrituras se los vuelvo a leer, versículo 32 Y se decían el uno al otro No ardía nuestro corazón en nosotros mientras nos hablaba en el camino y cuando nos abría las Escrituras? 
Quizás usted esté abrumado o desilusionado y piense que esto de ser cristiano, ir a la iglesia, servir a Dios, sea una pérdida de tiempo, que es una causa perdida. 
Le invito a que considere ir a la Palabra de Dios para recobrar fuerzas y aliento. 
La Palabra de Dios tiene poder para que su corazón vuelva a arder y contemplar claramente a nuestro Señor Jesús. Solamente la Palabra de Dios tiene ese poder. Jesús lo utilizó. Y queridos hermanos, la Biblia también nos enseña en el libro de Romanos capítulo uno versículo 16 Porque no me avergüenzo del evangelio, porque es poder de Dios para salvación a todo aquel que cree. Al judío, primeramente, y también al griego. Nuevamente quiero alentarlos en este día a que pueda renovar fuerzas y esperanzas y que pueda ir a la Palabra de Dios y deje que Jesús, Dios mismo, le hable profundamente a su vida. La Palabra de Dios tiene poder, poder para hacer arder nuevamente nuestros corazones.

 Que Dios los bendiga hasta un próximo encuentro.

Juan José Mena (Anciano Pastor – ICE DIOS ES AMOR – Bº Centenario – Santa Fe Capital)