🔊📖🐔 EL CANTO DEL GALLO
🗓️ Miércoles, 6/3/2024
Serie: 📖 ❤️ CONSEJOS Y VIDA
EP#7 Soledad
📖 Lectura: Eclesiastés 4:7-12
Eclesiastés 4:9 - Es mejor ser dos que uno, porque ambos pueden ayudarse mutuamente a lograr el éxito.
Hasta el día de hoy, la frase "mejor solo que mal acompañado" busca silenciar el problema de la soledad en el ser humano. Los justificativos, las razones de vivir "solo", intentan afianzar como positiva una falacia destructiva para el hombre y la mujer.
La verdad que el rey escribiente trae a la luz, pone el énfasis en que todo es mucho más difícil cuando uno lo hace sin compañía: El trabajo, la búsqueda de objetivos, el "calor corporal" (en sentido literal y figurado), la protección y cuidado. De hecho, en la individualidad, nadie guarda las espaldas de uno ( 4:12 ).
A su vez, podemos observar que escapar de la soledad requiere de ciertas virtudes implícitas: aprender a compartir las posesiones ( 4:8 ), aprender a disfrutar de las cosas simples ( 4:8 ), ayudar al prójimo en pro de un objetivo común ( 4:9 ), sostener y levantar al caído ( 4:10 ), ser compañeros emocionales ( 4:11 ), y estar dispuesto a dar la vida por el otro ( 4:12 ).
A veces nos preguntamos: "¿por qué estoy solo?". Quizás debamos repasar nuestra vida, nuestras intenciones, y aunque no es una regla que se aplique al 100%, lo más probable es que hemos hecho méritos para encontrarnos "abandonados". Hemos sido egoístas, ventajeros, y las personas que nos rodearon fueron empleadas por nosotros para nuestro provecho, exclusivamente, sin reciprocidad.
En fin, lo que se siembra se cosecha. Pequeñas gotas llenan un gran vaso con el tiempo, y asimismo, pequeñas pérdidas dejan un gran vacío.
Meditemos en los sinónimos de la palabra soledad. Podemos encontrar: Aislamiento, abandono, retiro, incomunicación, separación, desamparo, encierro, clausura, destierro, melancolía, nostalgia, añoranza, tristeza. ¿Esto es lo que queremos? Escuchemos al sabio Salomón, reflexionemos en la Palabra de Dios. El Creador nos hizo para vivir en sociedad.
🖋️ ELEAZAR SALOMÓN