🔊📖🐔 EL CANTO DEL GALLO
🗓️ Miércoles, 25/9/2024
Serie: 🕎 Aarón*
EP#8 Aarón - Su Legado, primera parte
📖 (Éxodo 3:7,8)
En las manos de Dios, lo que parece muerto florece, porque en Su plan lo imposible se transforma en vida. Así obra Dios: toma lo quebrantado, lo seco, lo olvidado, y lo llena de nueva vida. Lo que para los hombres es un final, para Dios es un nuevo comienzo. Quizás Aarón, quien seguramente deseaba una mejor vida para él y los suyos, pensó que una mejora en sus vidas sería que las cargas impuestas les fuesen quitadas. Pero Dios ya había diseñado un camino cuyo destino final sería mucho mejor. “Bien he visto la aflicción de mi pueblo…he oído su clamor…he conocido sus angustias…he descendido para librarlos y sacarlos a una tierra buena y ancha”; éstas fueron las palabras de Dios a Moisés. Aiden Tozer escribió “la gracia es como la lluvia; siempre llega en el momento justo”. Fue así que: “cuando vino el cumplimiento del tiempo, Dios envió a Su Hijo…para que redimiese a los que estaban bajo la ley, a fin de que recibiésemos la adopción de hijos” (Gálatas 4:4,5). El corazón seco y sin esperanza pudo dejar de ser regado por lágrimas y esfuerzos que no transforman, y ser bendecidos con la lluvia bendita descendida de los mismos cielos que transforma la vida de aquellos que arrepentidos de nuestros pecados hemos clamado a Él por perdón. “El que está en Cristo, nueva criatura es” (2ª Corintios 5:17). Esta transformación no distingue ni historias, ni pueblo de origen, ni rostros; es para todos. La gran obra se ha iniciado, el gran desafío es ver las circunstancias según la perspectiva de Dios. Si no lo hago siempre veré limitaciones, pero donde veo dificultades Dios muestra oportunidades para que le conozca un poco más. Su mirada traspasa lo temporal para posarse en lo eterno. Señor ayúdame a entender que “tus pensamientos no son mis pensamientos ni tus caminos mis caminos”. Como el sembrador que confía en la semilla enterrada, Dios sabe que, en Su tiempo perfecto, lo que parecía perdido brotará con fuerza, trayendo fruto abundante.
Heráclito, filósofo griego, dijo: “lo único constante en la vida es el cambio”. Esto es observable en nosotros mismos, con el paso del tiempo podemos notar el cambio en nuestro propio cuerpo y la incidencia del contexto en nuestros principios y valores. El gran desafío para Aarón, luego de haber sido elegido para estar junto a Moisés fue aprender que los cambios son un proceso. No podemos llegar a ningún lado si no damos el primer paso, en realidad si no entendemos que con el primer paso no alcanza para llegar a ningún lado. Dios comenzó una nueva obra en ti, y esa obra tiene una continuidad: pasos que debes dar para llegar al fin deseado (Filipenses 1:6). Avancemos paso a paso y así podremos encontrarnos en nuestro peregrinar cumpliendo el propósito para el cual fuimos alcanzados por Dios.
🖊️ Nelson Gallitto