UNA MISION PERSONAL

🔊📖 Centro Cristiano y Misionero ETERNIDAD 

🗓️ Martes, 12/11/2024

 SERIE: Enfocados en la mañana

 Hoy: UNA MISIÓN PERSONAL  

 📖 ”…ahora pues, levántate y pasa este Jordán, tú y todo este pueblo a la tierra que yo les doy a los hijos de Israel” Josué 1.2 
 
 LA MISION era clara: levántate, cruza, conquista.  Josué tenía la misión de concretar la promesa de Dios a Abraham de vivir en la tierra prometida. Josué entendió que la misión no se hace sola, tampoco es cuestión de “declararlo” … se requiere “ACCIÓN”. La misión sucede, cuando empiezo a hacer que suceda”.  
 
 😕 ¿Cómo hago para llevar adelante la tarea que Dios me encomienda?  Hay una teoría que se llama “reacción en cadena”. Esta dice que es necesario que se genere un movimiento inicial, para que empuje a otro y así sucesivamente, al activarse cada eslabón, se desarrolla la acción. Un ejemplo clásico es cuando jugamos con el dominó, se colocan uno al lado del otro dando formas diferentes y tan solo basta con mover el primero… para que todos los otros caigan en instantes.  
 
 🗣️ La misión que se le encomendó a Josué produjo una reacción en cadena. Lo primero que le dice Dios es que debía levantarse, es decir debía cambiar su postura, sus emociones y sus actitudes. Posiblemente Josué debía superar el duelo de la pérdida de Moisés, debía aceptar que era el hombre indicado al que Dios había elegido y que Dios no falla en eso. Debía vencer sus inseguridades, sus intranquilidades y ponerse de pie.  
Esa primera acción, ahora debía generar una segunda reacción que era ir al pueblo  a desafiarlos, volverles a recordar que la promesa de Dios, seguía viva. Que Dios no necesitaba tan solo de un hombre, que buscaba el valor y la devoción de todo el pueblo.  
Esta motivación, no podría quedarse en un discurso solamente, las palabras por mas motivadoras que fueran no son suficientes. Entonces aparece la tercera reacción en cadena que es la acción. Josué sabía que el río no se cruza si uno solo se para en la orilla: había que atravesarlo. Que las murallas de Jericó no se caen solas: había que rodearlas. Que la tierra prometida no se conquista sola: había que librar batallas. 
 
🤝 La misión de cumplir con lo que Dios quiere no es sentir o decir, es hacer. La misión es misión, cuando nos ponemos en acción. Al pasar de la idea a la acción, se produce una reacción en cadena que no solo nos auto contagia, sino contagia al entorno. El efecto es expansivo y comenzando por tu vida, llega a tu casa, tu escuela, tu ministerio y tu iglesia. Dios te necesita activo. 
 
 Javier Abdala